Si no conoces cuál es el impacto ambiental que genera tu estilo de vida, es momento para hacer un test para calcular tu huella ecológica. Ello ayudará a evaluar tu actuación en el entorno en que vives.
Pues no solo las grandes empresas son responsables del calentamiento global o los gobiernos los que deben actuar para detenerlo. Todos somos responsables y las pequeñas acciones también cuentan para mejorar la sostenibilidad del planeta.
Los hábitos de vida son los primeros indicativos que permiten hacer una evaluación de tu huella ecológica. Así que para saber si eres responsable con el ambiente entra a la página tuhuellaecologica.org y sabrás qué impacto está generando tu forma de vivir. Y si tus hábitos corresponden a un modo de vida saludable o debes hacer cambios para mejorarlos.
El test consta de cuatro secciones, energía, agua, residuos y materiales y transporte. Cada sección contiene subsecciones y preguntas con relación a tus hábitos de vida. Una vez finalices de contestar las preguntas de cada subsección se pulsa “calcular” y se muestran cifras de consumo. Ellas indicarán si tus hábitos se ubican encima o debajo de la media.
¿Por qué es importante medir la huella ecológica?
La huella ecológica es el impacto ambiental que produce cada persona sobre el planeta. Y mide cuál es el nivel de recursos naturales que requiere el humano para vivir. Pero la realidad es que cada vez los humanos consumimos más rápido los recursos naturales que el planeta tarda un año en producir.
También se están generando más desechos de su capacidad para procesarlos. Así, que nuestras costumbres y cómo hacemos las cosas diariamente, impactan el medio ambiente sin que sea muy evidente al momento.
La forma como se usan los electrodomésticos, la lavadora, prender las luces o la forma de botar la basura, tienen un impacto y si se hace en la forma correcta hacen la diferencia. Por lo tanto, medir la huella ecológica permite que mejoremos la actuación en el medio ambiente que nos rodea.
Ya que, por lo general no sabemos si estamos usando bien los recursos naturales. Y no tenemos conciencia del impacto que generamos al realizar las actividades y tareas diarias. Pero con el test para calcular la huella ecológica es posible medir el nivel de sostenibilidad de cada ciudadano.
Este es un inicio para cambiar los hábitos si es necesario y tener un estilo de vida más sostenible. Y así mejorar, para ser más responsable con el medio ambiente.
¿Por qué debemos reducir la huella ecológica y qué hacer para lograrlo?
Es importante reducir la huella ecológica porque el planeta ya no tiene capacidad para producir lo que consume su población. Además de que no puede procesar todos los desperdicios que se generan.
En poco tiempo el planeta ya no será capaz de producir la cantidad de cultivos agrícolas o el agua que requerimos para vivir. Si continúa el deterioro del medio ambiente.
En este sentido, en el ranking mundial de la Huella Ecológica, España se ubica en el puesto 22. Según las cifras recogidas y que maneja la organización WWF. Lo que indica, que se requieren 3 países con las mismas dimensiones de España para cubrir los requerimientos de recursos y satisfacer la demanda de la población.
En este sentido, es necesario evaluar el sistema alimentario actual, porque es insostenible. La agricultura ocupa solo el 34% del área productiva del país, y consume el 69% del agua dulce. Además de generar alrededor de las terceras partes de las emisiones de GEI.
Asimismo, se destina alrededor del 80% de tierras agrícolas a la producción ganadera. Para suministrar solo el 33% de la proteína que requiere la población.
En definitiva, conocer para qué sirve la huella ecológica y cómo medirla no aporta casi nada si no tomamos acciones para reducirla. Cada persona debe responsabilizarse y hacer su aporte para cuidar mejor el planeta. Así que es necesario comenzar desde casa a reducir la huella ecológica.
Una forma es usar el transporte público en lugar del automóvil. Así se disminuirá en gran cantidad la emisión de CO2. También es responsable consumir alimentos cosechados en la localidad donde vivas y de temporada.
Asimismo, es muy importante cuidar el consumo diario de agua. Evita los excesos y derramar el agua en grifos, cuando te bañas, cepillas los dientes o lavas la ropa. Y cuida el consumo de energía en casa.
También es una buena costumbre apagar las luces cuando no estés en la habitación y la computadora y televisor cuando no se usen. De igual forma, utiliza mecanismos de regulación, como termostatos y crono termostatos para controlar la calefacción y climatización.
Recuerda que los pequeños cambios de hábitos en las personas hacen grandes cambios en el planeta.